Solo le pido a Dios que te de mucha salud, felicidad y que te bendiga, mi lindo ahijado.
¡Buenos días ahijado mío! Los días pasan y cada vez eres más grande. Te deseo lo mejor que pases un excelente día.
Espero que pases el día de hoy muy bonito y con muchas metas por delante, mi ahijado adorado.
Ten un excelente día mi ahijado. Te lo deseo como tu madrina, por el gran amor que te tengo y porque eres como un hijo para mí.
Siempre te cuidaré y estaré ahí para todo lo que necesites. ¡Te deseo lo mejor, ahijado, el día de hoy!
Otro día que sale el hermoso sol. Recuerda que soy como una madre para ti y puedes verme como una amiga confiar en mí y te daré todos mis consejos para que vayas siempre por el camino del bien. Te quiero ahijado mío.
Nosotros, tus padrinos, queremos bendecirte en este día y todos los demás.
Eres el muchacho más bonito y hermoso que ven mis ojos, el motivo de mi alegría y felicidad. Que pases un lindo día.
Mi precioso ahijado, mi hijo de otra madre, el motivo de mis alegrías, solo te deseo que tengas un buen día.
Recuerdo el primer día que te vi, te sostuve en mis brazos y decidí cuidarte toda mi vida. Por eso el día de hoy te aconsejo vivir al máximo, pero con prudencia y respeto.
Buenos días mi bello ahijado, quiero expresarte con todo mi corazón mis más sincero cariño.
Querido ahijado, quiero desearte un feliz y dichoso día. Quiero que sepas que siempre estaré orgullosa por tus triunfos y te deseo el más grande de los éxitos.
Por medio de estas palabras de buenos días quiero que sepas lo mucho que nos importas. Te queremos ahijado.
Hoy y siempre deseo que todos los ángeles del cielo sean tu guía y te enseñen los caminos correctos a ti mi niño, ahijado querido.
Despierta ya que es un nuevo día, mi ahijado. Ante Dios juré y prometí cuidarte y ser como una segunda madre para ti.
Otro día empieza recargado de oportunidades. Quiero desearte el mejor de los éxitos y enviarte muchísimas buenas energías este día, de tu madrina que te quiere.